Los créditos, motor del sector en 2020.

La perspectiva es que 2019 será un poco mejor que 2018. De todas formas, no creo que sea un año en el que la demanda esté centrada en inversores: son los clientes que más se retraen ante es­cenarios de incertidumbre, como el que proyecta una elección presidencial.

La perspectiva es que 2019 será un poco mejor que 2018. De todas formas, no creo que sea un año en el que la demanda esté centrada en inversores: son los clientes que más se retraen ante escenarios de incertidumbre, como el que proyecta una elección presidencial.

En estos contextos, compran los usuarios finales que tienen una necesidad concreta, como mejorar la calidad de vida, agregar un cuarto o brindarle a sus hijos o nietos mayor contacto con el verde y los deportes. Puntualmente en los últimos meses hubo familias que decidieron comprar terrenos pa­ra construir, aprovechando la baja del costo en dólares. Por esta razón, el pro­ducto más demandado fueron los te­rrenos en barrios cerrados con entrega inmediata que permiten iniciar la cons­trucción de la casa apenas se adquiere la tierra.


Por otra parte, los proyectos que se lan­cen a la venta en pozo a un precio en lí­nea con el nuevo costo de construcción en dólares también serán muy busca­dos. Respecto a los precios, los propie­tarios de unidades usadas que quieran vender tendrán que bajar sus valores de venta porque el costo de reposición ha caído. Aunque en los hechos, no creo que haya una baja generalizada en los valores de las propiedades sino que directamente bajará el volumen de ope­raciones. A diferencia de muchos cole­gas, la mirada que tengo sobre la finan­ciación es que los créditos UVA llegaron para quedarse. Es de lo mejor que le ha pasado al sector en 20 años. Dicho esto,no creo que sean muchas las operacio­nes con créditos en 2019; pero, con me­nores tasas de inflación, si serán el mo­tor del mercado en 2020.


Por Esteban Edelstein Pernice PARA LA NACION